lunes, 6 de noviembre de 2017

Salven al filial

La directiva del Sevilla FC está viendo como su filial se hunde inexorablemente hacia la Segunda B.  Pero esa no es la peor noticia. Lo más triste es que no hace absolutamente nada para cambiarlo.
La debacle empezó antes de verano; el hombre más importante de cada línea dejó el equipo. Borja Lasso se fue a ¿jugar? al primer equipo, Diego González al Málaga e Ivi al Levante. Los refuerzos no han llenado ni a de lejos los huecos que las bajas dejaron. .
El Sevilla Atlético, después de 13 a jornadas es colista, con 0 victorias, 7 empates y 6 derrotas. Su pobre bagaje goleador alcanza los 8 tantos mientras que ha encajado 18. Números alarmantes ante los que nadie reacciona. "Saldremos adelante", "unidos lo sacaremos", "hay que tener paciencia". Típicos tópicos que sirven para prolongar este infierno en el que están los jugadores del Sevilla Atlético y en los que caen los propios jugadores después de cada encuentro en el que no ganan, es decir, en todos. .
Dejando a un lado las posibles mejoras tácticas del cuadro franjirojo (que las hay), el problema yace en un sitio más elevado. Desde el palco se mira hacia otro lado. ¿El problema es del entrenador o de quién le permite seguir allí jornada tras jornada, desastre tras desastre?

Los culpables principales del desastre / Diario de Sevilla


Se debe reaccionar cuanto antes ante esta lamentable situación, ahora que la salvación todavía es factible (está a 6 puntos). Hagan algo, antes de que sea (muy) tarde. Y cada jornada es una oportunidad perdida. No se demoren, traguénse su orgullo y cambien. Urge.