viernes, 20 de diciembre de 2013

Andrea Pirlo

Pirlo. Elegancia. Clase. Calidad. Talento. Uno de los mejores del mundo, sin duda. Siempre infravalorado.
Formó parte de la época dorada del Milán junto a Cafú, Dida, Nesta, Maldini, Gilardino, Gatusso e incluso Kaka'. Un pilar básico en ese equipo de estrellas. Fue Carlo Ancelotti (actual entrenador del Real Madrid) quien llevaba el timón del equipo rossonero. Y el italiano, tuvo el valor de sacar a Andrea del doble pivote, donde cumplía con creces, y posicionarle en la mediapunta. Y allí, explotó. Llevaba la batuta del equipo, controlaba y repartía el cuero, daba siempre el pase de gol o lo marcaba él mismo. Un Milán triunfador. 2 Champions, no está nada mal. Cuando Carlo despegó hacia Londres para entrenar al Chelsea, intentó llevarse al mago Pirlo con él. Pero Andrea se sentía en deuda con el equipo que le había dado todo. Y junto a Beckham, Ibra, Robinho, Thiago Silva, Pato y Ronaldinho entre otros volvió a formar un Milán campeón. Entonces, tras la marcha de muchos craks y la decadencia del equipo de San Siro, Pirlo creyó que su deuda ya estaba saldada.


Emigró a Turín, para jugar en la Juventus, junto a su amigo Gianluigi Buffon, con una propuesta de formar un equipo ganador con Vidal, Marchisio, Chiellini, Pogba... Lo volvió a conseguir, logró 2 ligas nacionales.
Con la selección italiana, Pirlo ha cosechado múltiples títulos y un gran juego. Un Mundial en 2006 o el subcampeonato de la Eurocopa 2012. Y actualmente, sigue tocando las teclas de la selección italiana y de la Vechia Signora .

Entre sus momentos mágicos quedará para el recuerdo el gol a lo Panenka a Hart en la Eurocopa 2012 (después declaró: "He lanzado así porque Hart tenía los humos muy subidos"), sus asistencias milimétricas o los más de 40 goles de falta directa que limpian las telarañas de las escuadras.
Para definirle me quedo sin duda con la frase que pronunció su compañero durante muchos años, Gatusso: "Al ver jugar a Pirlo, me pregunté si yo era futbolista".